En las fronteras de Europa. Controles, confinamientos, expulsiones. Informe 2009-2010.

Autor: Migreurop
Fecha: 12/11/2010
Comentario

En las fronteras de Europa. Controles, confinamientos, expulsiones. Informe 2009-2010.

En su segundo informe anual sobre las fronteras de Europa, la red Migreurop se centra en tres cuestiones claves del combate que llevan las autoridades contra las personas candidatas a la migración: los obstáculos a su desplazamiento, el confinamiento y la expulsión. 
Para esta segunda edición de su informe anual, la red Migreurop se centra en un trabajo crítico, realizado a partir de encuestas sobre la externalización de las políticas migratorias aplicadas por los países de la Unión Europea ampliada a 27 miembros.
Por "externalización", en el marco de una estrategia dirigida a retener a las personas migrantes fuera de las fronteras europeas, hay que entender la tendencia a subcontratar con terceros países la responsabilidad de impedir por todos los medios las salidas hacia Europa y hacerles aceptar la obligación de readmitir a todas las personas consideradas indeseables. Este doble mandato se ejecuta cada vez más lejos, por medio de compensaciones financieras o negociaciones diplomáticas, como muestra el estudio del caso de los países del Sahel- Sahara que se presenta aquí.
La externalización afecta gravemente a los países de la zona fronteriza, más expuestos por su situación geográfica a convertirse en destinos de primer tránsito, al tiempo que la Unión Europea les exige impedir en su territorio la progresión de estas personas que migran, categorizándolas en su conjunto como "ilegales": Polonia, Rumania, antes Grecia, pero también Ceuta, a quienes la geografía ha colocado en la primera línea de guerra contra las personas que migran, tienen que soportar ahora la carga de abordar todos los intentos de solicitar asilo mediante el rechazo, el encierro o el mantenimiento en espera por tiempo indefinido, como muestra la foto de portada.
También en el interior de Europa, en virtud de acuerdos bilaterales de dudosa legalidad o del reglamento conocido como "Dublín II", se coloca a las personas exiliadas en una marcha sin fin hacia ninguna parte, como ocurre a lo largo de los mares que separan Italia de Grecia. Y no es muy diferente la situación de las personas que migran constantemente perseguidas en Francia o Bélgica, o a las puertas de Inglaterra.
Esta sucesión de angustias, personas vagando, y muy a menudo muertes, mueven a Migreurop a recordar que el primer objetivo es hacer cumplir el derecho reconocido por los tratados internacionales, a salir de cualquier país y buscar protección en otros lugares, incluso en Europa.

Financiado por: Ministerio de Trabajo e Inmigración
Coordinado por: Universidad de León