Un dispositivo policial hispano-luso culmina con la desarticulación de una red de explotación sexual de mujeres.

Fecha: 05/03/2010
Comentario:


Han sido detenidas nueve personas en España y una más en Portugal.

Las mujeres llegaban a nuestro país procedentes de Brasil y del este de Europa.
En España se les imponía una “deuda” de 8.000 euros que debían saldar en clubes de Salamanca y del país luso.
Agentes de la Policía Nacional, en una operación realizada con la Policía portuguesa, han desarticulado una red de explotación sexual de mujeres en clubes de alterne de la provincia de Salamanca. Hay nueve detenidos en España y uno en Portugal y se han practicado registros en dos locales y en el domicilio de uno de los arrestados. Las mujeres llegaban a nuestro país procedentes de Brasil y del este de Europa. En España se les imponía una “deuda” de 8.000 euros que debían saldar en clubes de Salamanca y del país luso.
La denuncia de tres mujeres que fueron desplazadas desde Brasil por los miembros de la red dio comienzo a las pesquisas. Los investigadores españoles averiguaron que los responsables del grupo desarrollaban también parte de sus actividades en Portugal, por lo que contactaron con los agentes lusos a través de los mecanismos de cooperación policial internacional.
La rama española de la red se encontraba asentada en la localidad de Fuentes de Oñoro (Salamanca), donde contaba con dos clubes para la explotación sexual. Además, el grupo tenía numerosos contactos en Brasil y Rumanía que facilitaban la captación de las víctimas, en su mayoría procedentes de dicho país sudamericano y del este de Europa. 

Deuda creciente
Las mujeres eran dirigidas a los clubes a su llegada a España. La red les retiraba la “bolsa de viaje” (dinero en efectivo y una reserva hotelera) e inmediatamente les informaba de los supuestos gastos originados por su traslado a España. Esta “deuda”, del todo desmedida y abusiva, ascendía a 8.000 euros y se incrementaba cada día por una cantidad fija en concepto de comida y alojamiento. Sin embargo, las mujeres convivían en condiciones de hacinamiento, cuatro personas por habitación y con escasas medidas de higiene. Además, eran coaccionadas, amenazadas e incluso agredidas por los integrantes de la red.
Tras seis meses de investigaciones, los agentes dispusieron un dispositivo junto a la Policía lusa que culminó con la detención de 10 personas (una de ellas en Portugal) y el registro del domicilio del principal implicado y los clubes en Fuentes de Oñoro. En dichos registros se intervinieron un arma simulada con cuatro bombonas de gas comprimido, una defensa eléctrica, cuatro sprays antiagresión, una llave de pugilato (puño americano), seis cartuchos del calibre 22, 1.500 euros, cuadrantes de control de pases y consumiciones de los clientes, justificantes de ingresos bancarios, billetes de avión, reservas de hotel y otra documentación.
La investigación ha sido desarrollada por agentes de la UCRIF de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, la UCRIF de Valencia, la BPED de Salamanca, la Agencia Tributaria, la Polícia Judiciária y el SEF (Servicio de Extranjeros y Fronteras portugués).

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